¿Qué mejor manera de empezar el
día que con un café y un cupcake de chocolate? Bueno… o con uno de fresa… o
plátano… o de vainilla… si es que son
¡irresistibles! A lo que iba, hacía tiempo que mis compañer@s de trabajo
querían probar alguna de las cosas que hago, así que puse un día y… ¡dicho y
hecho!
La cuestión era decidir qué hacer
para intentar que todo el mundo se animara a probar, y hay una cosa que
difícilmente no gusta… sí… ¡el chocolate! Y por si acaso hice dos buttercream
diferentes de chocolate, uno de chocolate suave y otro intenso. Imposible
resistirse.
La receta es la del libro de
Alma, “Objetivo: Cupcake perfecto”, aunque doblé la cantidad de ingredientes
para tener cupcakes suficientes.
Vamos con los INGREDIENTES para
el bizcocho:
- 115 gr. de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 220 gr. de azúcar blanco
- 3 huevos M
- 180 gr. de harina
- 40 gr. de cacao en polvo sin azúcar
- 1 y ½ tsp (cucharadita) de levadura
- 120 ml de leche semidesnatada
- 1 tsp (cucharadita) de extracto de vainilla
PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno a unos
170ºC y preparamos los moldes con las cápsulas. Tamizamos la harina con la
levadura y el cacao y lo reservamos.
La masa lista para hornear |
Batimos en un bol la mantequilla
y el azúcar hasta que estén totalmente integrados. Vamos añadiendo los huevos,
uno a uno, batiendo hasta que se incorporen a la mezcla. Agregamos la mitad de
la mezcla de harina, levadura y cacao tamizada y batimos a velocidad baja y con
movimientos circulares -si usáis una batidora de mano- para que la masa coja
algo de aire y no se apelmacen los cupcakes al hornearlos. Añadimos la leche y
el extracto de vainilla y seguimos batiendo. Acabamos de incorporar el resto de
la mezcla de harina y seguimos batiendo hasta que la mezcla sea homogénea.
Horneamos unos 20-25 minutos, ya
sabéis que dependerá del tipo de horno, o hasta que los pinchemos con un
palillo y éste salga limpio. Recordad que si no queréis que se os bajen, no
debéis abrir el horno hasta que no hayan pasado por lo menos 15 minutos.
A punto para entrar al horno |
Una vez listos huelen que alimentan... |
Aquí están todos enfriándose…
aunque sea difícil intentar no coméroslos.
Mientras se enfrían vamos
preparando los dos buttercream.
INGREDIENTES para el buttercream
de CHOCOLATE INTENSO:
- 115 gr. de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 425 gr. de icing sugar o azúcar glasé
- 85 gr. de cacao el polvo sin azúcar
- 105 ml de leche semidesnatada
La PREPARACIÓN es similar a la de
cualquier buttercream (aquí tenéis un tutorial de la crema de queso) así que
tamizamos el azúcar glasé y el cacao y lo ponemos en un bol junto con la
mantequilla y la leche. Batimos a velocidad baja al principio (con cuidado para
no mancharlo todo de azúcar). Después subimos la velocidad y batimos al menos
unos 5 minutos más o hasta que la consistencia sea la deseada. Este buttercream
tendrá un color oscuro. Metemos en la nevera mientras no
vayamos a decorar los cupcakes.
La verdad es que no me quedó tal
y como yo esperaba puesto que la textura final no tenía la consistencia óptima,
y aunque el sabor era delicioso, la apariencia no me acabó de gustar. Lo
primero que pensé es que no había batido suficiente y me vino a la memoria mi
primera experiencia algo desastrosa con un frosting de Coca-Cola que algún día
os explicaré, pero estoy casi convencido de que el problema fue el cacao que
usé, no era el que suelo utilizar y es que más que un cacao para hacer a la
taza era un instantáneo, así que nunca más lo usaré (al menos para hacer un
buttercream).
INGREDIENTES para el buttercream
de CHOCOLATE SUAVE:
- 250 gr. de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 250 gr. de icing sugar o azúcar glasé
- 2 tbsp (cucharadas) de leche semidesnatada
- 150 gr. de chocolate negro
PREPARACIÓN:
Derretimos el chocolate negro al
baño maría o en el micro y dejamos que se baya templando. Tamizamos el azúcar
glasé y lo ponemos en un bol junto con la mantequilla y la leche. Batimos a
velocidad baja al principio y luego subimos la velocidad y batimos unos 5
minutos. Añadimos el chocolate derretido (aseguraros que esté templado tirando
a frío) y batimos de nuevo unos minutos hasta que el buttercream tenga la
consistencia necesaria. El color será más clarito que el anterior. Reservamos
en la nevera hasta que lo vayamos a utilizar. Al tener chocolate se endurece
más rápido.
Antes de decorarlos toca una de
las partes más divertidas de la receta… RELLENARLOS… y es que estos cupcacakes
llevan sorpresa dentro. ¿Os imagináis darle un bocado y que en su interior
lleven más chocolate? ¡Pues sí! Además cuando nadie se lo espera aún sabe mejor
jeje.
Para hacerlo simplemente tenemos
que usar un descorazonador, insertarlo en el centro y girándolo sacamos un
cachito. Rellenamos con lo que más nos guste y volvemos a poner la tapita. Sí,
la tapita hay que volver a ponerla… como dice Alma: “no vale comérsela antes”.
En este caso les puse sirope de chocolate.
Ahora sí podemos preparar las
mangas y decorar nuestros cupcakes. Para el buttercream de chocolate intenso
usé la boquilla 2D y para el de chocolate suave la 1M -las dos de Wilton- y les
añadí a unos sprinkles de corazones y a otros les puse un corazón de fondant.
Quedaron muy ricos y gustaron a
mis compañer@s de trabajo. Me encanta que la gente disfrute tanto degustando
mis creaciones como yo disfruto haciéndolas.
La semana que viene les llevaré cupcakes deliciosos que llevo tiempo queriendo hacer…
PD: Mirad un detalle de su corazón chocolateado... ¿qué os parece?
Salut!
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